¿Quieres pasar un rato en pareja y disfrutar de una experiencia única? Ven a pasar el fin de semana a Angers y descubre Terra Botanica, el primer parque temático de Francia y de Europa dedicado al universo vegetal. Un fin de semana para uniros más y visitar una ciudad llena de encanto: una pausa de dulzura angevina.
Vivir una experiencia inolvidable en Terra Botanica
Desconecta desde el primer día sumergiéndote en el universo atípico de Terra Botanica. Sigue el recorrido rodeado por más de 500 000 plantas llegadas desde todas las partes del mundo para vivir unas emociones increíbles y crear recuerdos en pareja.
Recupera tu alma de niño siguiendo el viaje de una gota de agua en un cine 4D, convirtiéndote en un buscador de ámbar y cruzando el sendero de los dinosaurios. Y si lo que te apetece es un momento de tranquilidad y serenidad, súbete a una embarcación y pasea por el río, un lugar en el que los colores y las formas de las flores transmiten una sensación feérica. Continúa con tu visita paseando por el invernadero de mariposas: sus alas batientes rozarán tu piel. Para terminar con un buen recuerdo, ¡gana altura subiéndote en el globo de gas más grande del mundo! (Tendrás que contar con un suplemento de 5€ para el ascenso).
Saborear el arte de vivir angevino
Tras una jornada vagando y buscando variedades poco frecuentes, seguro que te apetece pasar una velada en la orilla del Maine sentado y disfrutando de una copa de vino local en las terrazas de la Cale de la Savatte o en la Guinguette du Héron Carré. Una noche de sueño reparador y un desayuno a base de cruasanes recién hechos y ya estarás listo para vivir tu segunda jornada al ritmo de la ciudad angevina.
Pasear por las calles de Angers
Pasea por esta ciudad de múltiples facetas: seguro que llegas a un lugar tan encantador como auténtico. No hay nada más agradable que perderse en la ciudad histórica cogidos de la mano, recorriendo los callejones adoquinados y descubriendo las casas típicas del siglo XV. ¡Y al final de los callejones está el castillo! (Entrada no incluida en la estancia). Penetra en el corazón de la fortaleza, disfruta de la tranquilidad del patio interior y tómate tu tiempo para observar el Tapiz medieval del Apocalipsis (¡el más grande del mundo!), conservado como un tesoro. A la hora de comer, acércate a la Crêperie du Château, con su ambiente íntimo, al restaurante La Ferme, frente a la catedral de Saint-Maurice, o en el restaurante Osé antes visitar por la tarde la magnífica Galería David d’Angers.